lunes, 27 de julio de 2009

25 de juriol

Oía el rumor de la marea demasiado cerca de la rueda trasera de mi pequeña scooter, estaba a punto de alcanzarme. Las olas estaban a punto de darme caza, furiosas. Y yo tan sólo deseaba poder acelerar un poco más, subir cada vez más deprisa por el serpenteante camino que me tenía que llevar a casa. El miedo me arañaba la espalda, me tiraba del pelo. Y el viento huracanado pretendía arrancarme el casco. Tan sólo deseaba huir, escapar lejos...

Y al llegar a casa me dí cuenta de que no era nada. Tan solo soledad.

5 comentarios:

  1. Hi ha moments en que la soledat ens mira cruel, amb ferocitat, i ens bufa un alè gèlid al bescoll, i altres en que és una bona companya de viatge que ens dona pau i tranquilitat, i la serenitat i silenci necessaris per a escoltar-nos a nosaltres mateixos. Bisous chauds, belle nymphe!

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  2. Si... A vegades nam a fer cervesetes juntes, però és un poc arisca.
    De fet, nisiquiera és real, és un simple sentiment, una sensació. Mai estam sols però mus hi arribam a sentir. És extrany.

    Un bes;)!

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  3. eis, m'encanta com escrius en sèrio,

    Saps? tenc cotxe indefinit la nit de divendres :O podré anar per on vulgui finalment, ja et contaré cosetes una hora. Salut!

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  4. La soledad se combate con soledades, bienvenida al fin de los tiempos.
    Un saludo

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  5. Bé, esper que divendres siguem es dos que anem on volguem... Quina ràbia haver de demanar permís per tot d'aquesta manera u.u

    Y, sorpresa, un nuevo lector! He pasado por tu blog y ya lo sigo... Espero verte de nuevo por aquí. Muchos han auspiciado la llegada del fin de los tiempos, muchos han creido tenerlo arañándoles la espalda, y muchos se han equivocado. Esperaremos que el fin de los tiempos se entretenga un poco más y nos deje un margen de tiempo para seguir... viviendo. Saboreando cada instante de este fin. O de este cambio. Lo bueno y lo malo. Sentir la soledad en esta sociedad de masas es un mal más de nuestros tiempos. Otra paradoja. Bienvenido!

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